miércoles, 23 de enero de 2008

Vieja carta para el recuerdo

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Quizás hoy la tristeza a vuelto a aparecer en su corazón…no...no es tristeza... es fatiga, esa fatiga que provoca los años no vividos.
Las cosas no han cambiado en mucho, aunque por un momento se creyera todo el opuesto… él es justo como todo el qué circula en este mundo.
Las esperanzas se han estado volviendo a la subsistencia, en que el viejo tronco construido por los años para estas memorias que solo carcomen el alma. En el momento que la esperanza vale solo como un elemento banal de la vida...que gracioso… ha muerto…y él solo escribe:

"Te acuerdas de aquel baúl?? siempre preguntabas para que estaba ahí...pues bien, ahora lo sabes; tal vez existan miles de baúles más, inclusive este baúl tiene en su compañía algunos otros, pintorescos, con grabados hermosos y madera fina. Pero ese viejo baúl que tu siempre viste, es el más especial. Ese es nuestro baúl. Y no es que tu y yo lo hayamos construido.
Pero es que mi historia se reduce a una sola persona. Y esa persona eres tú.
Porque aunque la vida haya transcurrido, la lozanía de mi piel ya no sea la misma y los primeros recuerdos chuscos surgan en mis pláticas, indudablemente tu perteneces a ellas.

Sí, el tiempo sigue pasando; sin embargo tu recuerdo sigue pasando junto con él. Te siento como el primer día que estuve junto a ti. Sé también, que no he olvidado aquellas promesas de verano entre la lluvia que tocaba nuestra piel, como aquel único testigo que pudo existir, de aquello que me definió. Yo no sé si tu me recuerdes...pero me basta con comprender que yo no te he olvidado. Al igual que tú, yo no sé si ella me recuerde, pero tampoco importa, porque yo todos los días la recuerdo, y todas aquellas vivencias, y todos aquellas remembranzas, están en aquel viejo baúl... Aquel viejo baúl que guarda cada uno de mis sueños, cada una de mis añoranzas, y todo aquello que alguna vez fui... y que tal vez sigo siendo...pero este no es el momento. Ella no es la persona a quien le mostraré aquel viejo baúl...mira! sonrie! aún conservas tú ese privilegio...aún podemos llamarlo NUESTRO BAUL... Siempre Juntos...tu mejor que nadie conoce el significado de estas dos simples palabras..."

Y Skeu al leerle solo puede pensar:
'El recuerdo...hace poco me encontraba mortificada porque no sabía si esa persona a quien en estos momentos siento en lo más profundo de mi ser, me recordaría, luego entonces se aclaró la siguiente idea de Kierkegaad:'


"El animal es SER en el mundo, no necesita trascender, pero el ser humano es arrojado al mundo también como animal, pero no se conforma con ser en el mundo, el hombre quiere SER MÁS ALLÁ DEL MUNDO y el sentido del amor nos permite ser recordados después de haber dejado de ser en la vida de "x" persona".


Skeu respiró desde lo más profundo de su ser, esbozó una ligera sonrisa, dobló la carta aún humedecida por lágrimas satinadas, la colocó juntó a su vieja mesita y entonces se sentó como quien está agotado. Era hora de escuchar el concierto de mediodía... al final de cuentas, ella también recuerda como la madera, a través de la música...

3 Encierros de otros:

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Carlos dijo...

...la idea de compartir un baúl de recuerdos reales (o virtuales) con alguien, realmente me seduce ;)


Besote mi bella Soff.

Unknown dijo...

Condesciendo con tu tristeza y tus recuerdos coleguita.

Y aunque admiro tu sapiencia al leer a Kierkegaard, sugiero no le hagas demasiado caso, es muy depresivo =)

Abrazos fuertes!

Anónimo dijo...

Yo no sé...aunque hayan recuerdos de los que seamos parte, quizás llega el momento en que tenemos que desechar esa pertenencia que más que darnos réditos nos grava con impuestos.

De todos modos, en mi mesa de noche están guardados varios recuerdos de lo que fue ese amor...botarlos a la basura o quemarlos me parecería una falta de respeto, pero hace años que no los leo porque no me provoca hacerlo.

Saludos cordiales.

SALUDOS

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SOF

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