"Y vivieron felices por siempre"... siempre he querido escuchar ese final en las historias creadas; sin embargo por alguna u otra razón nunca he conseguido obtener el beso del príncipe amado acompañado de la promesa eterna.
Podría culpar a los cuentos fabricados en mi infancia que me hiceron pensar que eso podría suceder; podría culpar después a una sociedad machista que te enseña a lavar, planchar, y vivir con tus hijitos; podría por lo tanto culpar a mis padres por haberme regalado un muñeca a la cual cambiarle los pañales y darle el biberon...pero no lo quiero hacer. No quiero culpar a nadie ni estoy empeñada en encontrar la razón última de porque deseo tanto el amor junto a un hombre, formar una familia y educar a un bebé.
Yo lo describiría como un deseo que emana desde el fondo de mi ser, instinto no lo llamaría tampoco, porque algunos especialistas en el tema me lo refutarían de inmediato como hace algunos años lo hicieron. Solo lo llamaría así...deseo.
Es entonces saciar aquel gusto de sentirme humana, de sentirme mujer y de sentirme deseada. Es el gusto de poder amar a una persona, observarla mientras duerme, acariciar su rostro y lentamente acercarte a su oído para reafirmar el amor que nace en tu interior.
Es observar posteriormente a una pequeña criatura, tomar suavemente de su mano, rozar sus labios en su mejilla y sentir que la vida los ha unido para siempre.
Es entonces aquella complementariedad que el universo entero no ha podido definir, ni los grandes maestros ni la enorme ciencia podria descifrar.
Es para mí aquel sentimiento, aún no satisfecho, que me mueve, que me motiva, que me reinvindica a la vida, a mi vida.
Sin embargo, por alguna u otra razón, no ha llegado ese momento.
Entonces, mientras tanto, continuo en el capullo, como aquella oruga gorda que se arrastraba, y que en un buen momento, el búho sabio amigo, aquel animal que puede observarte de noche cuando nadie ve, le enseñó el camino del perdón.
Ahora pacientemente en su capullo, ha sacado su letrero en el proceso de transformación: "Princesa busca a su Príncipe"...en su dolor.
1 Encierros de otros:
el principe azul cada dia se va destiñiendo más y toma tono gris jajajaja...es el padecer actual...
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